miércoles, 1 de diciembre de 2010

Crónica de la Convivencia de Hermandades


Convivencia de hermandades, otro acto más programado en el año de la Coronación Canónica pasado por agua. Parece ser que Dios nos quiere tener con el nudo en la garganta hasta el gran día pero aún así el acto fue una victoria más para la hermandad de Nuestra Señora del Valle.

Muy de mañana y tranquilamente fueron llegando los componentes de cada hermandad palmerina acogidos con agradecimiento por el presidente de la hermandad patronal Guillermo López Toscano en la capilla del convento las Hermanas Carmelitas tienen. Un lugar muy cálido y acogedor en el que la mirada de Jesucristo en su cruz es la que protege y acuna todo el lugar en el que se encontraban sus fieles.

Una vez estando allí todos reunidos se procedió a rezar una oración entre los presentes acompañados de nuestro Rvdo. P. D. Francisco J. Martín Sirgo. A continuación hubo una charla que seguro que a más de uno dio que pensar. Una charla que hizo que todos los presentes buscasen en sus conciencias y se dieran cuenta si el camino que seguían era el correcto o, en su defecto, no iban por el buen sendero del Señor. Nuestro Párroco quiso hacer entender a todos los miembros de las hermandades que el pertenecer a una de ellas tendría que ser con el objetivo de enaltecer a su titular o titulares y no para ponerse galones y otro objetivo más que nuestro párroco quiso resaltar fue el de que todos tenemos que trabajar unidos siempre con la intersección de Nuestro Señor Jesucristo.

Al finalizar la charla titulada “El adviento en las hermandades” y sobre las 12 de la mañana, hora intermedia entre él día y la noche, se hizo el rezo del Ángelus. A continuación, y de la mano del presidente de Nuestra hermandad Patronal Guillermo López Toscano, se repartieron entre cada representante de las hermandades un plan de trabajo para su desarrollo en el seno de las Juntas de Gobierno.

Luego, y con la autoridad de Nuestro Párroco, se procedió a una eucaristía algo particular. Eucaristía dirigida, más que nada, a grupos numerosos y en aquél momento, a las hermandades. Nuestro Sacerdote volvió a hacer hincapié en el tema de la convivencia con la lectura de la palabra: “Tomad en serio vuestro proceder en esta vida. Ya sabéis con qué os rescataron: no con bienes efímeros, con oro o plata, sino al precio de la sangre de Cristo, el cordero sin defecto sin mancha.”. Al terminar esto se hicieron unas peticiones en las que algún presidente de los allí presentes quiso acordarse de todos nuestros hermanos enfermos, para que fuesen guiados por buen camino y así pudiesen llegar a su total sanación.

El presidente de la hermandad de la Virgen del Valle, y en agradecimiento por su asistencia obsequió a todas las hermandades con una réplica del cartel de la Coronación Canónica y por su ofrecimiento y gratitud, le hizo otro obsequio a la hermana superior de las Carmelitas y a Nuestro Párroco, por haber aceptado y apoyado este acto tan familiar.

Para finalizar el acto, se organizó una comida en la que participaron toda y cada una de las hermandades asistentes al mismo. Momento agradable para compartir charlas y opiniones.

Una vez más, Nuestra Madre del Valle fue elevada a los cielos con la fe y el buen hacer de todos los allí presentes.












Fotos: Rocío Garfia Pérez

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